José Luis García López, y el placer de dibujar por amor.


 Existen  autores que entran en la categoría de clásicos, dada su experiencia y trabajos en el medio de los cómics, de los cuales podemos disfrutar aún. Gente que ha pasado por generaciones gracias a su oficio y entereza, cuyas páginas son objeto de estudio para otros en este medio, mientras los lectores disfrutamos cada trazo e intervención que, a sus cansinos años, siguen regalando en alguna convención, entrevista o simple saludo, simpatía y humildad. Uno de esos magníficos maestros ha cumplido 72 años el día de ayer, en un mundo aquejado por una pandemia que afecta a su segmento de la población. Y es por ello, pensando en la fragilidad de estos momentos, y como cada año subimos un pequeño homenaje al maestro español, uno de los grandes en el mercado internacional norteamericano, un hombre humilde con un talento, simpatía y entrega a toda prueba. Tres sugerencias de lectura, tres obras fundamentales para entender el desarrollo y narrativa de este este creador. Con ustedes, tres del maestro eterno, José Luis García López:


1.- Cinder & Ashe (DC Comics, Mayo a Agosto, 1988, miniserie de cuatro números). Junto a Gerry Conway (otro de aquellos grandes autores de pasadas décadas, de bajo perfil y altamente creativo), García López nos ofrece una historia de genero policial negro, a ratos basado e inserto en toda la cultura de las armas, tan en boga durante las décadas del 70 y 80, en unos Estados Unidos hundido en la recesión económica, las guerras contra el tráfico de drogas y Vietnam. Dos detectives, Cinder Dubois y Jacob Ashe, ella hija de un soldado norteamericano y una prostituta, él un ex combatiente de Vietnam, a ratos mercenarios, a ratos gente que debe sobrevivir, se embarcan en una trama donde un caso cerrado vuelve, para traer los recuerdos de una vida anterior y los fracasos y aciertos de ambos. En la línea de obras televisivas de los últimos 20 años, "Cinder & Ashe" funciona como ejemplo narrativo a la hora de aprender como construir una gran historia, con dos personajes simples, pequeños, cuya vida no es la mejor, pero es propia.


2.- Twilight (DC Comics, Diciembre 1990 - Febrero de 1991, miniserie formato prestige) En esta oportunidad, nos encontramos con una obra de ciencia ficción, donde Howard Chaykin juega con los personajes DC de dicho género (Tommy Tomorrow transformado en un cabrón miserable y totalitarista, el taxista espacial, los caballeros espaciales, Manhunter 2070, por nombrar algunos), haciendo una obra final para los mismos, llevando a cabo un viaje de auto conocimiento, inmortalidad y crecimiento para la humanidad. El arte de García López resalta cada viñeta, al punto de estar leyendo el mejor storyboard de una película, cuya historia nunca veremos en pantalla.


3.- New Teen Titans Vol.2 #7 al #11 (Abril a Agosto, 1984) + DC Especial: El regreso de Donna Troy (Agosto a Noviembre 2004): Mención aparte merece estas dos historias, cuyo tiempo narrativo tardó 20 años en dar un cierre a la trama, ello puesto que el personaje fue evolucionando, teniendo diversos rebooteos y explicaciones para su origen, siempre interconectados a la raíz del personaje, y es que Donna Troy ha sido un enigma desde el día de su creación como personaje (originalmente, Wonder Girl es Diana, en sus aventuras adolescentes, en la misma línea de Superboy), pasando por estar ligado a Wonder Woman (su hermana), a los Titanes del mito griego (una de las semillas, hijos adoptivos de dicha estirpe de dioses griegos), a la humanidad (viviendo miles de vida, cuyo final siempre será trágico), y finalmente, y gracias a la historia de 2004, al multiverso (Harbinger). En la primera historia vemos los nexos de este personaje con los Titanes griegos, de forma sutil, pues la historia se enfoca en otro miembro del equipo, Lilith, cuyo origen se define en la misma, si bien hay elementos que se plantan como semillas, para luego germinar a posterioridad. Acompañando a Marv Wolfman, como sustituto de George Pérez, este relato nos muestra el alcance narrativo del autor. Es por ello, y 20 años después, Phil Jimenez pide trabajar con él y Pérez, siendo este ultimo encargado de las portadas y tintas para el interior, donde narra la historia de Donna, el multiverso y la verdadera naturaleza de un equipo que es más que eso, una familia.Y si destaco esta historia por sobre otros trabajos del maestro, es por la importancia que tiene para comprender como funciona el Universo DC.


Desde el país al fin del mundo, un abrazo, Don José Luis García López, el hombre del estilo impecable y significativo (dio pie al estilo de dibujar de DC Comics, en los años 70, 80 y 90). Por este y muchos años más, maestro.

Vicente Pascual Moscoso

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